18 marzo, 2009

Tlacoyo con huevos a caballo: del "Chef Hamacher"


Descripción (en Itacate de laJornada):
Tlacoyos
Marco Buenrostro y Cristina Barros

Entre las muchas preparaciones hechas con masa de nixtamal, están los tlacoyos. Ya Bernardino de Sahagún y sus informantes describían en el siglo XVI, que en el tianguis se vendían tortillas delgadas y gruesas, redondas y prolongadas “y otras enrolladas hechas redondas, y las que tienen dentro masa de frisoles cocidos o por cocer…” También mencionan el íztac tlaxcalli ética tlaoyo que significa tortilla muy blanca que tiene de dentro harina de frijoles no cocidos.

Jesús Vargas Valdés, quien viaja con frecuencia de Chihuahua a la capital, ha reflexionado sobre el gusto de los mexicanos del norte por los frijoles bayos, y el de los del centro por los frijoles negros, que él ha aprendido a apreciar. Al respecto nos regala estas líneas para el Itacate; las compartimos gustosos:

“Uno de los atractivos gastronómicos de la ciudad de México lo representan las señoras que preparan tlacoyos rellenos con una especie de pasta de frijol negro, o de haba. Es algo de lo más típico en la ciudad de México y la cocina se improvisa en cualquier esquina. Benditas cocineras a las que nadie les dijo que deberían vestirse con un mandil de cuadritos, pero todas ellas se distinguen en las calles por esta prenda que puede ser de color rojo, azul o verde.

“Llegan temprano a su lugar, le dan una buena regada al piso, acomodan la pequeña mesa de madera, la cubren con su mantel de hule, suben la bandeja de plástico que contiene una gran bola de nixtamal, alrededor las cazuelas con las habas, con frijol negro, nopales, queso rayado y la salsa roja.

“Al centro instalan el ‘bracero’ o ‘anafre’, encienden el carbón y cuando el fuego está bien ‘amansado’ acomodan encima el disco de lámina; empiezan a preparar los tlacoyos, tomando primero una bolita de masa que extienden a medias y luego le agregan la porción de haba o de frijol negro que envuelven con gran destreza y luego extienden sobre el comal hasta que se cuece. Lo levantan del comal, lo cubren con una buena capa de nopales, agregan el queso rayado y encima una buena porción de salsa roja. Este procedimiento no es tan fácil como lo escribo, son años, son generaciones y generaciones de mujeres que han heredado el arte del tlacoyo.

Desde que empiezan a salir los tlacoyos, como si los tiempos se hubieran cronometrado, también empiezan a llegar los comensales callejeros, ¿de qué lo quiere joven? Se sirven en un plato de plástico cubierto con un cuadro de papel estraza y cada mordida es una delicia que nos traslada a los tiempos prehispánicos.

Jesús cierra diciendo y nosotros con él: no hay tlacoyos más deliciosos que los que se preparan con frijol negro.


Hoy, prefiero ponerles un par de huevos "a caballo": así llaman en Argentina al par de huevos fritos (al plato ó estrellados) montados encima de otro platillo.

Ingredientes:
4 tlacoyos, salsa, crema, queso rallado, ensalada de nopales (opcional), 2 huevos frescos por tlacoyo, un poco de mantequilla, sal y pimienta al gusto, café de grano recién molido, con azúcar y leche al gusto.

Direcciones:
Se compran los Tlacoyos, las salsas, la crema y el queso rallado con su marchanta favorita del mercadito local. (pues el Cheff  Hamacher vive en Shanghái, ahora!) A veces les añado una ensalada de nopales (que también vende la misma marchantita).


Se ponen dos huevos a freír en un sartén con poca mantequilla, añadiendo sal y pimienta negra al gusto. Se pone en un plato al Tlacoyo y se le añade encima, la salsa, la crema y el queso rallado (al gusto).

Se le colocan encima al par de huevos fritos, y también se les añade salsa al gusto. Acompañar con un buen café natural (de mi cafetera Italiana, por ejemplo). O cerveza en su defecto.

¡Listo! Buen provecho ...mmm... ¡puro colesterol del bueno!

Fuente: laJornada
Fotos: el MiLUsos

4 comentarios:

Mayte U dijo...

¿Huevos fritos en mantequilla? Eso, querido Donyan, es que no los has probado con aceite de oliva virgen:lo mejor del mundo. Y para acompañar, nada de café, un buen vino tinto.

Eso sí, tu receta lo que debe ser es completamente light, jajaja.

un Autista Dislèxico dijo...

Bueno, me gusta el aceite de olivo en ensaladas y otras cosas, pero para yo guisar, siempre lo hice, o con mantequilla, o con manteca de cerdo. Los mecánicos decimos que el aceite es para las máquinas...pero el gusto, se rompe en géneros!

Si tomo vino tinto en la mañana, ya no trabajo en todo el día! En cuanto a lo "light", sigo en mis 65 kg de rigor (por toda mi vida!) y comiendo de todo, basado carne roja. No compro ´patatas fritas" de bolsita (qué tomada de pelo...) sino mejor las hago en casa y ahí sí, con aceite para máquinas...que diga, de olivo.

No soy adicto al "fast food", ni al McDonald's, y puedo comprar por acá huevos de rancho, leche de ordeña, crema y quesos frescos...ademas todo en los mercaditos locales, se hace en casa. En los Restaurantes famosos y caros, casi todo lo compran en el "Súper"!

Y los chocolates...no me empalago, puedo comer los que quiera, así como mazapanes, turrones (los muy duros ya no, por la dentadura y la edad) sin subir un gramo, ni descomponerme del estómago. Creo que cuando me quemaron el sistema digestivo a los 7 años, me hicieron un favor ENORME, ahora resiste una BOMBA (o varias...)
Un beso

CHEEKY IRISH dijo...

mira q a mi me gusta la comida mexicana, nopales ??? uhmmm que ricos!!! huevos rancheros?? por favor...

Eloise Barry dijo...

¿Para mí pueden ser unos huaraches? ¿O unos sopes con salsa roja? Aunque casi daría mi primogenitura por una cestita de tacos de nana, buche, maciza y chicharrón. Otros la vendían por un plato de lentejas XDD